Para niños

Lección:

Los niños aprenden que para llegar a ser hijos de Dios, necesitan arrepentirse y confesar sus pecados. También aprenden que sólo por medio de Jesús podemos ir a Dios, es decir, Él es el camino hacia nuestro Padre celestial. Y, ¿cómo es que Jesús es el camino? Es así porque es el único Salvador. Tenemos que creer en Él. La referencia bíblica base es Hechos 16:25-34.

Instrucciones:

Los niños arman un moño con papel crepé y una cinta de color. Luego lo pegan al corazón impreso en papel.

Lección:

Todos tenemos corazones llenos de pecado, y para ser hijos de Dios necesitamos arrepentirnos, creer que Jesús es el único camino al Padre y que Él murió por nosotros para limpiarnos de nuestro pecado. Pero por nosotros mismos no podemos creer esto. Sólo la obra del Espíritu Santo en los corazones de las personas hace que sean personas nuevas, hijos de Dios, hace que creamos que Jesús es nuestro salvador, y que busquemos agradar a Dios. La lectura sugerida es Juan 3:1-5.

Instrucciones:

Los niños colorean y pegan las figuras en el siguiente orden:

1. Un corazón con manchas negras representando el corazón de pecado,
2. Un rectángulo con la palabra arrepentimiento,
3. Una cruz representando la obra que Cristo hizo por los suyos,
4. Un corazón blanco representando el corazón nuevo que nos da el Espíritu Santo.

Lección:

Dios hizo maravillosamente a Adán y a Eva, pero Satanás tentó a Eva. Adán y Eva desobedecieron, y se hicieron criaturas pecaminosas, con corazones malos. Pero, ¿qué pasa cuando llegamos a ser hijos de Dios? Somos cambiados, nacemos de nuevo, tenemos corazones nuevos. El Espíritu Santo nos da un corazón nuevo, y Él vive en nuestro corazón, haciéndonos más y más como Jesús. Lectura bíblica base: 1 Juan 3:1-3.

Instrucciones:

Imprima la carita en una hoja en blanco y recórtela. Péguela con un broche o algo que le permita girar la carita, mostrando un niño triste y enojado que se convierte en un niño alegre.

Lección:

Los apóstoles y amigos de Jesús estaban muy tristes. Ellos esperaban que Jesús fuera su Salvador, pero cómo podría ser su Salvador si estaba muerto. Lo pusieron en la tumba, y cerraron la entrada con una gran piedra. Al tercer día fueron algunas mujeres y encontraron la piedra movida, y no a Jesús. Vieron un ángel quien les dijo que Jesús ¡había resucitado! Estaba vivo, ya no estaba en la tumba, y ahora él está en el cielo y sabe todo en cuanto a nosotros. Lectura bíblica base: Mateo 28:1-8.

Instrucciones:

Se moldea una tumba en plastilina, así como en la foto, y se le muestra a los niños, o se deja para que ellos la hagan. Permita que agreguen detalles. Esta es la forma como eran las tumbas en ese tiempo.

Lección:

Los niños aprenden qué quiere decir confíar en Dios, esto es, tener la seguridad de que Dios está con nosotros y nos cuida. La Biblia cuenta cómo el apóstol Pedro confió en el Señor Jesús e hizo algo maravilloso, caminar sobre el agua sin hundirse, pero al quitar los ojos de Jesús tuvo miedo y empezó a hundirse. El Señor Jesús cogió la mano de Pedro y lo sostuvo. Los hijos de Dios no debemos tener miedo al hacer lo que Dios y Jesús quieren que hagamos. Dios ha prometido cuidarnos. Lectura bíblica base: Mateo 14:24-31.

Instrucciones:

Se utiliza papel azul (dos tonalidades), y se recorta en forma de olas. Se toma otro papel y se recorta en forma de bote, como se muestra en la foto. Luego se recorta una silueta de Jesús y otra Pedro. Por último, se pegan los recortes en una hoja blanca. Puede dejar las siluetas sin pegar, para moverlas.

Lección:

Los niños aprenderán que los que aman a Dios le obedecen en todo lo que Él manda. La Biblia cuenta del rey Saúl, quien fue un hombre valiente. Dios lo envía a hacer la guerra contra una nación mala, y a destruir todo, pero Saúl dejó vivos a los animales. El profeta Samuel le muestra a Saúl que ha pecado, porque ha desobedecido a Dios, y cómo Dios le va a quitar el reino. El rey no quería reconocer su pecado, al contrario, disimuló con una buena obra para Dios. Nosotros, los hijos de Dios, podemos hacer grandes cosas para Dios, pero si en verdad le amamos, primero le obedeceremos. Lectura bíblica base: Juan 15:8-12.

Instrucciones:

Los niños empacan en papel de regalo una caja que previamente se ha llenado, sin que sepan su contenido. Una vez esté empacada, se discutirá sobre cómo se sentirían cuando recibieran un regalo tan bonito. A continuación se abrirá y se encontrará algo desagradable y sin valor, por ejemplo una media rota. Se hace la comparación del contenido del regalo con el corazón del rey Saúl, por fuera con apariencia de ser muy bueno y bonito, y por dentro malo.

Lección:

A veces los hijos de Dios son tentados a hacer el mal, y tenemos que decir No a quienes quieren que hagamos lo malo. La Biblia cuenta sobre un rey que hizo un gran ídolo, y quería que todas las personas se inclinaran y lo adoraran. Pero tres jóvenes no se arrodillaron. Ellos le dijeron "No". Nosotros, muchas veces somos tentados a desobedecer a nuestros padres, o nuestros amigos nos incitan a hacer lo malo, entonces tenemos que decir ¡No! A veces es muy difícil hacerlo, pero Jesús nos ayudará. Lectura bíblica base: Daniel 3:19-29.

Instrucciones:

En una hoja se escribe la palabra NO. Los niños pegarán lentejas, u otras semillas, sobre la línea de las letras. Luego se pega la hoja a una cartulina.

Lección:

Podemos leer muchos libros buenos, pero hay uno que todos debemos leer: la Biblia. Este es el libro de Dios, que ha escrito para nosotros. Cuenta sobre quienes somos y por qué estamos aquí. La Biblia es grande, y no podemos leerla en un solo día, sino de a poquito, todos los días, y así aprenderemos lo que Dios quiere que sepamos de Él, cuán grande es Él, y cómo podemos vivir para Él. Lectura bíblica base: Deuteronomio 11:18-21.

Instrucciones:

Con hojas de colores se arma un librito. A este libro se le escriben o se imprimen y se pegan citas bíblicas, para que el niño recuerde la lección aprendida. Las citas pueden ser: Jeremías 15:16, Proverbios 3:1, Isaías 26:3, Proverbios 9:10.

Lección:

Los niños aprenden que los hijos de Dios son felices cuando saben que Jesús les ama, pero a veces tienen que sufrir por causa de Jesús. Esto, porque la gente que no ama a Dios, tampoco ama a sus hijos. Algunos de los hijos de Dios han sufrido mucho por su amor, incluso han muerto, así como Esteban. Y los que amaron mucho a Dios fueron felices cuando sufrieron por el amor de Jesús, tal como lo fue Esteban. La referencia bíblica se encuentra en Hechos 7:54-60.

Instrucciones:

El niño colorea a Esteban. Con papel de colores se recortan pequeños círculos que representan las piedras y se le pegan al dibujo, también pueden ser piedritas reales.

Lección:

Los niños aprenden que los hijos de Dios miran hacia adelante, a lo que viene, a las maravillas que Jesús tiene para nosotros en el cielo. Entonces los problemas de hoy no nos harán tristes. No importa si somos pobres. ¡Ya somos ricos si tenemos a Jesús! No importa si estamos enfermos. Estaremos todos bien y nunca más estaremos enfermos en el cielo. No importa si se burlan de nosotros. Vamos a estar felices para siempre con Jesús cuando nos lleve para estar con Él. Referencia bíblica: 1 Juan 3:1-3.

Instrucciones:

Con papel de colores se recortan los vestidos y las caritas de varias personas. Los niños completan y dibujan las personas alegres que representan a los cristianos que van a estar con Cristo en el cielo.

Lección:

Jesús dijo a sus discipulos que el Padre nos daría todas las cosas buenas que le pidamos. Y cuando lo pidamos, seguró que nos ayudará a ser buenos. Él sabe que para nosotros es difícil vivir para Él, como debemos. Sabe que somos débiles y pecadores. Pero quiere que vivamos para Él. Él se complace en ayudarnos a arrancar la maleza de pecado que hay en nuestro corazón. Primero, debemos hablarle del pecado en nuestro corazón, y luego pedirle que nos ayude. Referencia bíblica: 1 Juan 5:12-15.

Instrucciones:

Se imprime por lado y lado el formato adjunto en papel de colores, de forma que los cuadrados coincidan. Luego se recorta el cuadrado por la línea punteada. A continuación se recorta, desde el borde hasta un centimetro antes del centro. Con un chinche se hacen perforaciones en el centro y en las cuatro puntas y se arma el ringlete. Finalmente se pega con el chinche a un palito de balso.

Lección:

Dios, el Padre, nos ayuda a vivir para Él. El Espíritu Santo nos ayuda cuando hacemos lo que Él dice en la Biblia. Y Jesús, el Hijo de Dios, también nos ayuda, lo hace orando por nosotros. Él nos mira desde el cielo, y ve todo lo que hacemos, por esto pide al Padre que nos guarde del pecado, también porque nos haga amarnos los unos a los otros, y porque nos haga santos. Referencia bíblica: Juan 17:9-15.

Instrucciones:

Se recortan las partes de la persona en los moldes, con papel de colores. Luego los niños arman y pegan la figura a la hoja. Esta figura representa la persona que ora a Jesús en todo tiempo.

Lección:

En esta lección aprendemos que los ángeles son ayudantes de Dios, y viven en el cielo. Son espíritus, por lo cual no podemos verlos. Hace muchos años, cuando Dios tenía un mensaje especial, enviaba a un ángel al mundo para dar su mensaje. Dios le daba un cuerpo al ángel para que la gente pudiera verlo. Jesús un día le dijo a sus discípulos que hay ángeles especiales que cuidan a los niños, ¿no es maravilloso eso? El Padre en el cielo les dice cómo cuidar a los niños. Referencia biblica: Hechos 12:5-11.

Instrucciones:

El niño colorea a los israelitas caminando por el desierto, la nube y el fuego. Recortan la nube y el fuego y los pegan en la parte de arriba del dibujo, representando el ángel de Dios que cuidaba a su pueblo de día en forma de nube, y de noche como columna de fuego.

Lección:

Se hace un repaso de las lecciones aprendidas acerca de cómo viven los hijos de Dios, y cómo ayuda Dios a que sus hijos vivan para Él. También se repasan los versículos y las preguntas para aprender de memoria. El repaso se hace a través del método de preguntas y respuestas, usando como ayuda el juego de la escalera.

Instrucciones:

Se utiliza un dado y fichas conforme con la cantidad de niños. Cada niño tiene su juego, y por turnos cada niño lanza el dado y adelanta casillas de acuerdo con el número, y responde una pregunta. Al finalizar pueden repartirse premios.

Lección:

Dios es tan grande y poderoso, y nosotros tan pequeños y pecadores... y aun así podemos hablar con Él. ¡Él nos escucha y nos contesta! Así como Jesús oraba al Padre cuando estuvo aquí en la tierra, también nosotros podemos hablar con Dios. Podemos contarle todo sobre nosotros, y Él nos responde a través de la Biblia y también le habla a nuestros corazones. ¡Él quiere que le oremos! Por esto Jesús enseñó a orar a sus discípulos, y a nosotros también. La oración ejemplo que nos dio es conocida como El Padre Nuestro. Versículo clave: Mateo 6:9. Referencia biblica: Filipenses 4:6,7

Instrucciones:

Los niños trazan una línea desde un dibujo en el lado izquierdo, hasta su correspondiente en el lado derecho. Luego de esto pueden colorear imágenes.