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Lección:
En esta lección vemos que Jesús ya no es un niño, sino que ha crecido y fue bautizado. El bautismo es un símbolo de lavamiento de nuestros pecados, pero Jesús no se bautizó porque hubiese pecado (Jesús nunca peco), sino para darnos ejemplo a nosotros de obediencia y de la necesidad que tenemos de ser limpios de nuestros pecados. El pecado es como mugre en nuestro corazón y solo Jesús puede limpiarnos de esa suciedad. Referencia Bíblica: Mateo 3:13-17 Versículo clave: Mateo 3:17.
Instrucciones:
1. Pega la hoja a un cartón, para darle firmeza a las piezas,
2. Decora el dibujo a tu gusto (con colores, témperas, papel de colores, algodón...)
3. Recorta, con ayuda de un adulto, por las líneas punteadas,
4. ¡Ya está listo tu rompecabezas!...diviértete con tus amigos armándolo.