3.2 Cristo Jesús, su obra

Aunque Cristo Jesús hizo muchos milagros y obras poderosas, esto no fue su propósito principal al venir a este mundo. Como ya hemos visto, usted ha pecado y sus pecados lo han separado de Dios, porque Él es Santo. Cada pecado tiene que ser castigado.

Dios ha señalado dos lugares donde tratar con el pecado. El primero es el lago de fuego donde la gente sufre eternamente, como castigo por sus propios pecados. El segundo es la cruz donde el Dios-hombre, Cristo Jesús, sufrió y murió por los pecados de otros. La cruz fue el lugar que Dios señaló, no sólo para tratar con el pecado sino para quitarlo, (Efesios 2:16; Colosenses 2:13-14. 1 Pedro 2:24).

¡Esta es la razón por la cual el evangelio, palabra que significa ‘buenas noticias’ es tan glorioso! Siendo que la muerte (tipificada por el sacrificio de los animales en el Antiguo Testamento) fue la única manera de poder pagar por el pecado, Cristo Jesús vino como el Cordero de Dios para morir en la cruz por los pecados de otros. Él es la propiciación por los pecados y su muerte hizo posible la reconciliación del hombre con Dios. La ira de Dios ya no está sobre el pecador arrepentido y reconciliado con Dios por medio de Cristo Jesús, (Isaías 53:5, 10-12; Romanos 3:25; Gálatas 1:4; Tito 2:14; Hebreos 1:3, 9:26-28, 10:12. 1 Corintios 15:3. 1 Juan 4:10).

Ahora hay esperanza para los pecadores, cuyo estado es de separación, condenación y enemistad con Dios, pues por medio del sacrificio de Cristo el pecador es reconciliado con Dios. “Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne...”, (Romanos 5:10. 2 Corintios 5:18; Hebreos 2:17. 1 Pedro 3:18) ¡Estas son en realidad buenas noticias!

Es muy importante entender que Dios salva, perdona y reconcilia solo a las personas que se arrepientan de sus pecados y por fe reciban a Cristo Jesús como Salvador y Señor personal.

El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.” Juan 3:36

 

Preguntas de reflexión:

1. ¿Cuál fue la causa de la expiación?
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2. ¿Por qué fue necesaria la expiación?
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3. ¿De qué es esclavo el hombre? (Juan 8:34)
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4. ¿Cuál es la única manera en que los hombres pueden ser libres? (Juan 8:36)
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5. Lea los siguientes versículos de la Escritura y describa lo que llevó a cabo la muerte de Cristo:

A. 1 Pedro 3:18 __________________________________________________

B. Romanos 5:10 ________________________________________________

C. 2 Corintios 5:21 _______________________________________________

D. Efesios 1:7 ___________________________________________________

 

La obra de Cristo en la cruz y su resurrección es la única solución para los problemas del hombre. Es por esto que Pedro proclamó de Jesucristo:
Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.” Hechos 4:12

 

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Versión para tomar notas, en pdf (2 páginas) 

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